En esta serie fotográfica, las Baianas del Candomblé bailan el 2 de febrero de Bahía con la ligereza de las olas y la firmeza de raíces que no se quiebran.
Vestidas de blanco, con faldas que giran como mareas y collares que cargan memorias ancestrales, caminan por las calles de piedra como si cada paso fuera una oración.
Son plegarias en movimiento, bordadas de axé, guardianas de una fe que atraviesa siglos.
En el día de Iemanjá, esparcen la magia azul de un pueblo que baila, canta y honra su historia.
Con cada gesto, recuerdan que Bahía no se explica, hay que sentirla.
Porque las Baianas son misterio, fuerza y encanto.
Son lo sagrado que baila entre dos mundos.